El proyecto HeArtmony fue inspirado por la asociación internacional New Humanity, Gen Rosso, Dance Lab y otras 5 asociaciones europeas y de Oriente Medio, como en España la Fundación Igino Giordani a través del grupo @mosaico_grlp integrado por jóvenes con la pasión por la música, danza y arte.
Algunos de los integrantes de Mosaico introducen este proyecto de Corazón, Arte y Armonía que tiene como objetivo principal desarrollar metodologías de inclusión social para migrantes y refugiados a través del arte.
En estos tiempos, algunos países europeos se han convertido en lugares de tránsito temporal o de estancia para personas de otras nacionalidades, como los subsaharianos, los del norte de África, Siria, Pakistán, Afganistán y ahora también Ucrania.
Como sabemos el problema de los migrantes en la costa mediterránea es un tema complejo y multidimensional que incluye cuestiones políticas, sociales, económicas y humanitarias. Los migrantes que llegan a las costas del Mediterráneo a menudo huyen de conflictos armados, persecución, violencia y pobreza extrema en sus países de origen.
A pesar de que muchos de estos migrantes buscan refugio en Europa, a menudo enfrentan una serie de obstáculos para lograrlo, incluyendo políticas de inmigración restrictivas, barreras lingüísticas, falta de apoyo social y discriminación.
Además, el viaje en sí mismo puede ser peligroso e incluso mortal, ya que muchos migrantes deben hacer travesías peligrosas por mar en condiciones inseguras y a menudo sin el equipo adecuado.
En la costa mediterránea, las autoridades locales y las organizaciones de ayuda a menudo trabajan juntas para proporcionar asistencia humanitaria y apoyo a los migrantes que llegan a la costa. Sin embargo, debido a la gran cantidad de personas que llegan y a la complejidad de los problemas que enfrentan, a menudo es difícil para estas organizaciones brindar la ayuda necesaria para todos los migrantes.
El problema de los migrantes en la costa mediterránea es un problema complejo que requiere soluciones integrales que aborden tanto las causas subyacentes de la migración como las necesidades humanitarias inmediatas de los migrantes.
En los últimos meses, Mosaico ha colaborado en tres actividades formativas junto a otros jóvenes de diferentes nacionalidades con la experiencia inmersiva de compartir y hacer caer la desconfianza, falta de apoyo social a través del arte.
La Fundación Igino Giordani se enorgullece en conmemorar el aniversario de la partida de Igino Giordani hacia el «paraíso» con un evento especial en el Centro Internacional de Movimiento de los Focolares en Roca del Papa, Roma.
El Centro Igino Giordani, con el nombre en su honor, realizará un programa que mostrará algunos episodios de su vida, destacando su legado y su impacto en el mundo.
Una hora de Fuego, con testimonios inéditos de ayer y de hoy.El evento tendrá lugar el 18 de abril, de 17:30 a 18:30 en el Auditorio del Centro, ubicado en Vía Frascati, 306, 00040 Roca del Papa RM. También se transmitirá en vivo a través del siguiente enlace: https://live.focolare.org/giordani/ para aquellos que no puedan estar presentes.
Igino Giordani fue un escritor, periodista, político y pensador cristiano, que dejó una huella indeleble en la historia de Italia y del mundo. Su compromiso con la paz, la justicia social y el diálogo interreligioso lo convierten en una figura inspiradora para generaciones presentes y futuras.
El Centro Igino Giordani se estableció para promover y difundir su legado y para inspirar a otros a seguir su ejemplo. Como fundación, estamos orgullosos de ser parte de este esfuerzo y esperamos que este evento sea una oportunidad para honrar su memoria y celebrar su vida y legado.
Como seres humanos, a menudo nos enfocamos en nuestras diferencias en lugar de en lo que nos une: nuestra pertenencia común a la humanidad y nuestra existencia compartida en este universo. En lugar de vernos como individuos separados y distintos, deberíamos vernos a nosotros mismos como células vivas de la humanidad, todos conectados en esta experiencia colectiva.
Es en este sentido que podemos decir que nos sentimos ciudadanos del universo, incrustados vitalmente en la continuidad no resuelta del ser. Nuestra existencia en este mundo no es aislada ni separada de la de los demás, sino que estamos todos juntos en este viaje, compartiendo los mismos desafíos y oportunidades. En este mismo sentido el escritor argentino Jorge Luis Borges, ha hablado sobre la conexión de la humanidad con el universo y la importancia de reconocer nuestra existencia compartida.
Si bien puede parecer una idea abstracta, reconocer nuestra conexión con la humanidad puede tener un impacto muy real en cómo interactuamos con los demás y en cómo tratamos nuestro mundo. Si vemos a cada ser humano como una parte vital de la misma red de vida, es más probable que tomemos decisiones que benefician a todos en lugar de solo a nosotros mismos.
¿Cuál es nuestro aporte como células vivas de la humanidad?
Podemos trabajar para crear un mundo más justo y sostenible, donde se valoren todas las formas de vida y se respeten los derechos humanos fundamentales. Podemos comprometernos a aprender de las diferencias culturales y a trabajar juntos para resolver los problemas globales, desde el cambio climático hasta la pobreza y la desigualdad.
Hoy en día, más que nunca, es importante que tomemos medidas y pongamos en práctica estos valores. La pandemia de COVID-19 ha destacado nuestra interdependencia como seres humanos y ha resaltado la necesidad de colaborar para abordar los desafíos globales.
Como ciudadanos del universo, tenemos la responsabilidad y la oportunidad de cambiar las cosas en el mundo que compartimos. Nuestro aporte puede ser pequeño o grande, pero es importante que cada uno de nosotros tome medidas para promover la justicia y la sostenibilidad. En última instancia, todos somos células vivas de la humanidad, coetáneos de la inmortalidad y responsables de construir un futuro mejor para todos.
El Tercer Sector es una parte importante de la sociedad actual, ya que desempeña un papel crucial en la promoción del bienestar social y económico. El Tercer Sector, también conocido como sector social, está compuesto por organizaciones sin fines de lucro, ONGs, fundaciones y otras entidades que buscan mejorar la calidad de vida de las personas y contribuir al desarrollo sostenible de la sociedad.
Entre las principales funciones del Tercer Sector se encuentran:
La defensa de los derechos humanos y la promoción de políticas públicas que favorezcan la igualdad y la inclusión social.
La generación de empleo y el fomento del emprendimiento social.
La promoción del desarrollo sostenible y la protección del medio ambiente.
La prestación de servicios sociales y de asistencia a personas en situación de vulnerabilidad.
La promoción de la cultura, el deporte y la educación.
La promoción de la innovación social y la creación de alianzas entre diferentes actores de la sociedad.
El Tercer Sector es un actor clave en la sociedad actual, ya que contribuye a la construcción de una sociedad más justa, equitativa y sostenible. Y no sólo sino también en la creación de alianzas y la promoción de los Objetivos de Desarrollo .
Desde la Asociación española de Fundraising, basados en un estudio remarcan la relevancia económica del Tercer Sector en España, que alcanza el 1,4% del cálculo total del PIB anual. Lo que equivale a un total de 17.500 millones de euros en ingresos de todas las entidades.
Nuestro aporte como Fundación Giordani varía dependiendo de los proyectos en los que trabajamos y también con las organizaciones patners. Algunos de nuestros principales patners son: New Humanity, AMU, Movimiento de los Focolares y el Centro Igino Giordani. Estas organizaciones sin fines de lucro, trabajamos en proyectos de ayuda humanitaria, como el suministro de alimentos y atención médica en áreas de desastres naturales o conflictos armados, como en la difusión de valores y formación integral de la persona.
Desde la FIG te esperamos a colaborar en proyectos en beneficio del bien público, en cooperación de desarrollo internacional, formación integral, apoyo a personas en riesgo de exclusión como así también en emergencias.
Las organizaciones no gubernamentales (ONG) y fundaciones como la FIG distribuyen sus fondos en tres categorías principales: gastos de misión, administración y captación de fondos. Esta división es esencial para garantizar una gestión eficiente y sostenible de sus actividades.
Gastos de misión: Representan la mayor parte del presupuesto y se destinan directamente a los proyectos y actividades que responden al objetivo principal de la entidad, como programas educativos, atención sanitaria, protección a personas en riesgos de exclusión, cooperación al desarrollo como en emergencias entre otros.
Gastos de administración: Incluyen los recursos necesarios para el funcionamiento interno de la organización, como la gestión contable, planificación, seguimiento de actividades y cumplimiento de obligaciones legales. Aunque no impactan directamente en los beneficiarios, son indispensables para asegurar una operación adecuada y transparente.
Gastos de captación de fondos: Se refieren a las inversiones realizadas para obtener recursos financieros, como campañas de recaudación, eventos benéficos y estrategias de comunicación. Estas actividades son cruciales para mantener la sostenibilidad financiera y permitir la continuidad de la misión de la organización.
Según datos de la Fundación Lealtad, las ONG acreditadas destinan, en promedio, un 84% de sus fondos a gastos de misión, un 9% a administración y un 7% a captación de fondos. Este equilibrio refleja una gestión responsable, asegurando que la mayor parte de los recursos se dirijan a los fines sociales, mientras se mantienen las estructuras necesarias para su operatividad y crecimiento.
Comprender esta distribución ayuda a los donantes a tener una visión clara de cómo se emplean sus aportaciones y la importancia de cada categoría en el funcionamiento eficaz de las ONG y fundaciones.